Un año más nos disponemos a celebrar los días más señalados de la navidad y a despedir el 2017, donde como siempre hemos tenido que decir adiós a vecinos muy queridos, y hemos podido dar la bienvenida a otros nuevos. Aprovecho por eso estos momentos para mandar un afectuoso abrazo a los que han vivido esos momentos de dolor, y a los que han podido disfrutar de la felicidad de la llegada de nuevos miembros de la familia. Cada historia personal, cada experiencia, ha conformado la propia historia de Conil. Para algunas personas ha sido un buen año, otras no pueden decir lo mismo. Pero como siempre, le daremos la bienvenida al 2018 con las esperanzas puestas en que sea un año que nos depare la mayor felicidad posible a todos y a todas. Encaramos el futuro cada día, pero sin duda la navidad es ese momento donde nos paramos a recapitular y analizar el futuro que deseamos, el que prevemos también.
Y si de algo estoy seguro y confiado es de la actitud ante el futuro del
pueblo de Conil. A lo largo de nuestra historia hemos dado ejemplo de un
trabajo conjunto en pro del bien común. Que hemos sabido superar nuestras
individualidades e intereses, muy defendibles porque cada uno sabe lo que
necesita y está viviendo, pero siempre teniendo en cuenta la construcción
colectiva para impulsar el desarrollo y el bienestar de nuestro pueblo. Siempre
hemos conseguido nuestros avances por nosotros y nosotras mismas. No hemos
esperado grandes soluciones de fuera, y sin esperarlas nos hemos puesto a
trabajar. Lo hemos hecho desde la pesca, la agricultura, el turismo, las
empresas, las asociaciones, y las familias.... Siempre hemos acabado unidos
trabajando por todos y todas. Esa ha sido nuestra gran seña de identidad y
nuestra fortaleza. Han venido y vendrán tiempos difíciles, pero juntos, remando
en la misma dirección como hemos hecho siempre, el futuro nos abrirá sus
puertas.
Estos días toca celebrar desde la fiesta, desde la familia y amigos. Aunque
transcurran los años por nuestras vidas, siempre esperamos de la navidad que
sea un comienzo de algo bueno. Deseamos unos a otros el fin de las situaciones
difíciles y el comienzo de otras mucho más placenteras. Deseando también que el
año por comenzar sea siempre mejor. Es momento de encontrar un hueco en
nuestras ajetreadas vidas y disfrutar con la gente que queremos, reencontrarnos
con los que no hace tiempo que vemos y por supuesto guardar un sitio en
nuestros recuerdos para aquellos que ya no están. El trabajo y el esfuerzo
forman parte de nuestro día a día. Por eso las fiestas deben ser ese momento
que todos y todas nos merecemos para divertirnos, para demostrar afecto, para
pasear por un pueblo que queremos y que engalanamos para celebrarlo.
Y no puedo dejar pasar, que junto a las personas que viven estas fechas con
alegría, hay muchas personas que están pasando por momentos duros. Por
circunstancias personales, laborales, de salud, económicas, etc... no siempre
se vive la Navidad en la situación que he expresado antes. A estas personas
debe ir dirigida también nuestro pensamiento y obra estos días. Conil es un
pueblo solidario, los hechos lo demuestran. Las dificultades nos afectan a
todos y todas a lo largo de nuestra vida, aunque sin duda a algunos más que a
otros/as. Es de justicia social que volvamos siempre nuestro gesto a las
personas que más lo necesitan ahora. No sería una celebración propia de nuestro
pueblo olvidarnos de nuestra necesaria solidaridad. Sabemos hacerlo, darle el
sitio junto a las felicitaciones a nuestras manos tendidas, todo el año, pero
en fechas como estas, las distancias entre realidades de las personas aún se
evidencian más. Conil sabe hacerlo. Y estoy seguro que seguirá en ese camino en
el futuro.
Se aproximan unos días en los que nos encantará disfrutar de nuestros
hogares con la gente más próxima, pero también os invito a disfrutar de un
Conil engalanado para las fiestas, de las compras en los comercios de la
localidad, un gesto muy necesario y por el que nos enriquecemos todos y todas,
generando actividad económica que va más allá de la simple acción de la compra.
Y a pasear por sus calles, en sus bares, y en las actividades que hemos
organizado. Como un ejemplo más de un trabajo en común, nuestro amplio programa
de actividades de Navidad se ha hecho desde el empeño no solo municipal sino
también de los colectivos que han unido sus fuerzas para conseguir que esta
Navidad, y muy especialmente para los niños y niñas, sea un recuerdo especial.
Esperamos que os guste, que podáis disfrutar de ellas. Pero sobre todo, deseo
para cada uno de los ciudadanos y ciudadanas de Conil que estos días sean un
entrañable momento, si , pero también el inicio de un año de aun mayor
bienestar y prosperidad para nuestro pueblo. Para todas y todos.
Feliz
Navidad y próspero Año Nuevo.